BAJO EL VOLCÁN

Hasta en la planificada Europa, la imprevisible naturaleza puede abrir una puerta al caos. Ha ocurrido ahora con el vómito de cenizas del volcán Eyjafjalla (casi impronunciable en nuestro ámbito lingüístico) y su densa nube –áspera como la piedra pómez- que ha obligado a paralizar el tráfico aéreo. Un desastre para una Europa demasiado confiada en el avión como medio de transporte.

Claro que hubo un tiempo en que por las grietas de esa misma geología fluyó el magma de la revolución. Según los vulcanólogos, la erupción en 1783 del volcán Laki -también en tierras de Islandia- fue uno de los factores de la hambruna que asoló el norte de Europa y que desencadenó la ola revolucionaria con la que se finiquitó el Siglo de las Luces.
Ahora, la negra nube volcánica dejó a Camps en tierras belgas sin poder volar de regreso a su añorado Gürtel. ¿Y qué hacía Camps en Bélgica? Poca cosa. Cualquier excusa es buena para viajar. Éste era uno de esos muchos viajes con los que el Molt Honorable pretende poner tierra de por medio a una realidad que le es demasiado incómoda. El motivo del viaje es lo de menos. Dijo la nota oficial que era una visita al Parlamento Europeo para ver cómo iba lo suyo. ¿Los trajes? ¡No! Lo del trasvase del Ebro.

BUEN PAÑO
Mientras, aquí, en el mundo de los mortales, el Supremo anunciaba que el 12 de mayo haría pública su decisión sobre el archivo de la causa de los trajes llevado a cabo por el TSJ de la CV. Nunca va mal recordar que aquella decisión de un Tribunal presidido por el “más que amigo” Juan Luis de la Rúa, contó con el voto en contra de uno de los cinco magistrados de la Sala. El tribunal, tras negarse a ver el informe de la policía judicial, no encontró suficiente causa de delito por cohecho pasivo impropio en la actuación de Camps, Costa, Campos y Betoret. El PSPV y la Fiscalía recurrieron dicho archivo. Lógico.

Desde aquella decisión, las pruebas que apuntan a una posible financiación ilegal del PP valenciano han ido acumulándose. Así lo apunta la parte levantada del sumario que instruye el juez del TSJ de Madrid. Pedreira no ha indagado más por no ser asunto de su competencia.

Por si las tribulaciones del Molt Honorable no eran suficientes, el ex tesorero del PP, Luis Bárcenas, ha presentado su dimisión como senador. Mal precedente. Según ha dicho el propio interesado, lo ha hecho por iniciativa propia. Nada de presiones del partido, ni mucho menos de Mariano Rajoy -su valedor hasta la fecha- no fuera que el remedio empeorase la enfermedad. A partir de ahora, todas las miradas se posarán en el líder de los conservadores valencianos. Mal lo tiene Camps si quiere pasar desapercibido. Los periodistas no le van a dejar descanso, y sus camaradas ya pueden ir poniéndole velas a Santa Rita para que la situación procesal del jefe no empeore.
DERRIBOS
La otra Rita, la alcaldesa, va de insumisa. Ante la orden del Tribunal Constitucional de paralizar los derribos en el Cabanyal, la duquesa del tro de bac ha sacado la chequera y está dispuesta a comprar todas las casas que pueda con los 60 millones del Plan Confianza que dice que le dará su amigo Camps. O sea, a cargo del contribuyente, faltaría más. Casas que luego demolerá para abrir su avenida. Eso, después de amenazar a los vecinos del barrio, levantar un muro de desprecio tan alto como el de Gaza, y anunciar que a partir de ahora les negará todos los permisos de obras. ¡Cómo si no lo estuviera haciendo ya!

Aquí, como en la novela de Malcolm Lowry, vivimos sobre un volcán de emociones cuya erupción es imprevisible. Las tres causas abiertas al juez Garzón son un buen ejemplo de sinergia neofranquista. Falange, Manos Limpias y el PP van de la mano. Unos no quieren que se abran las fosas del terror franquista, otros castigan a Garzón por su proyección internacional y los colegas de Rajoy buscan que se archive el caso Gürtel, como se hizo con el caso Naseiro. La nube de cenizas del volcán Eyjafjalla no es nada comparada con la que nosotros tenemos encima.

URBANO GARCÍA
urbanogarciaperez@gmail.com

FOTOS:
El volcán Eyjafjalla en erupción.
Camps y Costa en Les Corts Valencianes. Carles Francesc. EL PAIS
Forges. EL PAIS. 11 de abril de 2010