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jueves, 27 de enero de 2011

PINGANILLOS

Miércoles 19 de enero. Fecha para el recuerdo en nuestra reciente historia democrática. A partir de ese día, en el Senado es posible expresarse en cualquiera de las lenguas oficiales que hay en España. Una pequeña reforma, un símbolo en periodo de crisis. 
Y ya se sabe que en tiempos tan duros la derecha siempre aprovecha para recortar derechos. Esta vez, el estado del bienestar y el autonómico. Dos conquistas: la social y la política, vistas con malos ojos por quienes preferirían que nada cambiase para que todo siguiera igual. Ambas están en cuestión. Y no sólo por el PP. A los famosos mercados, que no son otra cosa que el capital financiero que los controla, también le molestan. 
La social porque libera a los trabajadores de la esclavitud. La política porque resuelve tensiones territoriales mediante el juego democrático. Además, son dos instrumentos necesarios para avanzar en la modernización del Estado.
TRADUCTORES
                Por sus hechos los conoceréis. En el PP dicen lo que dicen y hacen lo que hacen. Pero, ni hacen lo que dicen, ni dicen lo que hacen. Dicen defender la lengua valenciana, pero se niegan a utilizarla en el Senado. No es el momento, argumentan. ¿Qué esperan, a que esté muerta? 
Los senadores valencianos del PP –incluidos los provenientes de Unión Valenciana- no se salieron ni un ápice del guión que les marcó Rajoy, su caudillo. Un capricho caro, dicen. Ocultan que el gasto en el servicio de traducción apenas llega al 0,7% del presupuesto de la Cámara. Eso sí, exigieron traductores en valenciano –que luego no usaron- para no compartirlos con los que sí eran comunes para senadores catalanes y de Baleares. Extraña idea de ahorro. Una bronca similar protagonizó el PP en el Parlamento Europeo. Allí, su ceguera patriotera logró que el valenciano se quedara fuera de juego. En teoría, en el Senado se sienta la representación territorial, con sus paisajes, sus paisanajes y sus diferentes lenguas. Una Cámara casi federal. Se quedó a medio camino pendiente de acomodarse al nuevo estado autonómico. La reforma nunca llegó.             
                La senadora y ministra de Sanidad, Leire Pajín, justificó no usar el pingajillo en sus conocimientos de las cuatro lenguas. Debería ser lo normal. Son lenguas propias, como el castellano. Deberían estudiarse en Institutos y Escuelas Oficiales de Idiomas. Deberían oírse en la televisión pública. Tal vez, conocer mejor a los otros nos uniría más que la razón de la fuerza. Es cuestión de convivencia. 
DESENCAJADOS
                Así nos hemos quedado tras conocer que Bancaja y su filial, el Banco de Valencia, no cumplen los nuevos criterios de solvencia marcados por el Ministerio. Las dos entidades financieras están contaminadas por el virus tóxico que el PP ayudó a expandir. Un virus en forma de inversiones inmobiliarias sin garantías de recuperación. A fondo perdido, como la financiación de faraónicas empresas auspiciadas por el poder político al que Bancaja se plegó sin rechistar.
                Bancos y Cajas serán intervenidos durante 5 años a partir de septiembre si no cumplen dichos criterios. ¡20.000 millones de euros! Es lo que se calcula que necesitará la banca española para salir de apuros. Podrán obtenerlos de inversores privados. No será fácil. Por eso se piensa que gran parte del dinero del rescate será público. Una oportunidad para crear una banca pública que facilite créditos y ayude a dinamizar la economía. Pero esa no es la apuesta del gobierno. De nuevo, se socializarán las pérdidas y se privatizarán los beneficios.    

SEDIENTOS
                “Hay sed de urnas”, dijo un eufórico Rajoy en el acto de propaganda del PP celebrado en Sevilla, coreado por algunos ilustres imputados valencianos. Don Mariano tiene razón, la ciudadanía está sedienta. Pero tiene sed de empleo, de decencia, de ética, de moralidad en la vida pública. Está harta de demagogia, de victimismo, de mentiras enteras y medias verdades. De eso el PP no dice ni mu. Para Rajoy nada mejor que el modelo valenciano: una Hacienda en bancarrota y una sociedad resignada.

URBANO GARCIA
urbanogarciaperez@gmail.com
Imágenes:
1 Senado, 19 de enero de 2011. De www.traquetomia.blogspot.com
2 Torre de Babel. De Bruegel, el viejo, (1525-1569)
3 Mapa autonómico. De www.elmundoviajes.elmundo.es
4 Viñeta sobre los traductores del Senado. De Canalsu para www.lakodorniz.com
5 Auriculares o pinganillo.
6 Leire Pajín en el Senado. De www.rojoyazul.es
7 Logotipo Bancaja. De www.depositosbancos.com
8 Roig, Camps, Ecclestone y Olivas. Bancaja al servicio de la política. EFE
9 Rajoy y Aznar en la Convención del PP en Sevilla. José Manuel Vidal. EFE

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