Lunes, 18 de julio de 2016. 80 años después del golpe
militar contra el gobierno legítimo de la II República española, otro golpe
ocupa la primera plana de los diarios. Esta vez es en Turquía, al otro extremo,
en la costa oriental del Mediterráneo. Los protagonistas también son militares.
No les gustaba como estaba resolviendo el gobierno de Erdogan los múltiples
conflictos en los que está sumido su país. La historia contemporánea turca está
plagada de pronunciamientos militares desde que Kemal Atatürk, el padre de la actual
patria, dio a principio del siglo XX el golpe de gracia a un imperio otomano en
descomposición. Salvadas las distancias, algo parecido ocurrió en las Españas. Ruinas
imperiales, frágiles democracias. En aquella época y con demasiada frecuencia,
ante las dificultades para gestionar los retos de la modernización, el poder
civil era usurpado por la milicia. Ahí terminan los parecidos. Atatürk tomó
como modelo la revolución francesa de 1789. Franco, la utopía reaccionaria de
un pasado imperial imaginado. Turquía se apoyó en el ocaso de los imperios para
reinventarse como nación. El franquismo, en el auge del fascismo para armar su dictadura.
MEMORIA
El
inicial fracaso del golpe del 36 dio paso a un sangriento conflicto con elementos
de guerra civil pero también de crisis internacional. La guerra de España fue un
magnífico campo de ensayo para la escalada bélica que se vivía en Europa con el
auge de los fascismos. Planteada como limpieza ideológica por parte de los
militares sublevados, 8 décadas después del golpe más de 100.000 asesinados, prácticamente
todos leales a la República, aún yacen en las cunetas. Como también siguen
viéndose en muchas ciudades símbolos y nombres ligados al franquismo. En 2007,
el gobierno de ZP sacó adelante la Ley de la Memoria Histórica. A pesar del avance
que supuso, el boicot del PP ha limitado su aplicación. Ahora, una comisión
apoyada por Rodríguez Zapatero plantea una Iniciativa Legislativa Popular para intentar
vencer estos obstáculos. Y algunas instituciones democráticas están retirando
honores y nombramientos que otorgó la dictadura. Sin ir más lejos, la
Diputación de Valencia ha quitado el nombramiento de Franco como presidente
honorario de la entidad provincial. Aunque tarde, un paso necesario para ir
cerrando heridas.
En
España, a diferencia de otros países europeos, no está penado hacer apología ni
exhibir simbología fascista. ¿Hasta cuándo? Aprovechando el vacío legal y la
tolerancia eclesiástica, un particular organizó una misa por Franco en la
catedral de Valencia. Dice el arzobispo Cañizares que se cede la Seu para misa a todo el que lo pide.
Habrá que oficiar una por el alma del diablo.
PUENTES
Lo
primero que hizo Erdogan para frenar el golpe fue usar las redes sociales que poco
antes había censurado. ¿Lección de las primaveras árabes? El autócrata no
desprecia nada para afianzar su poder. Lo segundo, cerrar los puentes del
Bósforo que unen Asia con Europa. A los dictadores sólo les gustan los puentes
aéreos para transportar sus tropas. Lo tercero, detener a más de 40.000
militares, jueces, fiscales y también civiles, maestros muchos de ellos. Reprimir
para vencer. Lo cuarto, querer reinstaurar la pena de muerte… De manual. Ningún
dictador es igual a otro, pero todos se parecen. A veces, una delgada línea
separa una dictadura de una mala democracia. La X Legislatura fue un buen
ejemplo de lo delgada que es esa línea. Tener mayoría absoluta y gobernar a
golpe de decreto acerca ambos regímenes. Todos los puentes para el diálogo
fueron dinamitados por Rajoy y sus ministros. El PP convirtió el Congreso en un
páramo. Con esos antecedentes, no es raro que nadie quiera pactar con el PP. Se
cosecha lo que se siembra. Claro que ahí está C’s para echar una mano al establishment. Y la derecha
nacionalista vasca y catalana, atenta a sus trapicheos.
Martes,
19 de julio. Constitución de las Cámaras. Salta la sorpresa. En el Congreso, el
PP da dos puestos en la Mesa a C’s a cambio de su apoyo a Ana Pastor como
Presidenta. La ex Ministra de Fomento –la del Alvia y la que pone piedras en
los railes del eje mediterráneo- es votada por los suyos, los de C’s, de
Convergencia, PNV y Coalición Canaria. En la Mesa del Senado se sentará el PNV.
Mientras, Rita ocupa su escaño. ¿Alguien duda para qué sirve la Cámara Alta?
URBANO GARCIA
No hay comentarios:
Publicar un comentario